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16, El Entusiasmo

La siguiente es una traducción del texto original en inglés de Hilary Barrett (quien no habla español) realizada por Verónica Lassa como aporte al Yijing en su viaje por los siglos.

Si hay comentarios u observaciones que puedan mejorar las versiones en español, contactar a Verónica a través de https://urdirlatrama.blogspot.com.ar/p/i-ching.html para que se tome debida nota.

¡Muchas gracias!


En el hexagrama 16 el trueno que impulsa el nuevo crecimiento se encuentra arriba de la tierra. La energía innovadora anda libre y tronando por el mundo. Para los antiguos reyes esto significaba inspiración para hacer música porque así se encauzan y se concentran las energías liberadas en las personas.

El antiguo ideograma para Yu, ‘Motivación’ o ‘Entusiasmo’ es el dibujo de un elefante. El elefante es la encarnación de la fuerza y el vigor, además de la alegría. Pero también es algo que se debe tratar con muchísimo respeto. Tus bueyes son fuertes, pero además son predecibles. El poder del elefante es casi imposible de imaginar y nunca se lo puede domesticar del todo. A diferencia de otros animales, no caben dudas de que tiene sus propias intenciones que, por otra parte, nos resultan bastante inescrutables. ¿Qué harás con esta enorme concentración de poder que tiene sus metas?

Cuestiones como esta, la de contactar con energías en estado crudo y encauzarlas para obtener resultados positivos y exitosos, se encuentran muchas en el I Ching. Me parece que este hexagrama de trata específicamente de las maneras de responder a esas energías que te ‘atrapan’, como si estuvieras ‘en las garras’ de algún sentimiento o inspiración. La segunda parte del ideograma Yu son manos o, quizá, las lanzaderas de un telar. O sea que no se trata únicamente de que existen motivaciones intensas, sino que además se trata de los modos en que las manejamos y las hacemos comunes a todos, o de la manera en que urdimos esos entusiasmos en la trama de nuestra vida.

El elemento ‘elefante’ significa también, de por sí, ‘imagen’, como en el Ala con los antiguos reyes y su música, la Gran Imagen. Funciona como una composición musical que encauza ese poder en crudo y le da una forma que para nosotros resulta comprensible. La energía se vuelve acción en nuestro mundo mediante las formas que toman las imágenes y así tenemos nuevas maneras de comunicarnos entre nosotros y con nosotros mismos.

En la práctica, este hexagrama podría ser una señal de que tienes que tomar conciencia de qué es lo despierta tu inspiración antes de que empiece a arrastrarte hacia lugares novedosos. Cuando se trata de movilizar tus tropas personales vas a necesitar contar con apoyo y orientación antes de moverte. Esa motivación inmensa tiene un potencial tremendo si se le encuentra una salida realmente creativa. El peligro es que es igual de fácil perderse entre tantas imágenes colectivas que encontrarse a uno mismo. Es probable que no sepas (incluso que no quieras saber) adónde te lleva ese entusiasmo. Los elefantes suelen tapar todo el horizonte.

Por último:

Un padre (que tuvo la generosidad de darme autorización para compartir esta historia) consultó una vez de qué manera podía ayudar mejor a su hija con parálisis cerebral. Con el hexagrama 16 en la respuesta le hablé acerca de la tarea de llevar impulsos de energía al plano consciente, a la expresión personal (resultó ser que a la pequeña le encanta cantar) y le expliqué algunos de los significados del elefante. Me contestó que hablaban de los elefantes casi todos los días con su hija. Para relajar los músculos, la niña tenía que restablecer un control consciente sobre su musculatura y entonces, dijo, iba a estimularla con estas palabras ‘dile a tus elefantes que suelten la pierna’. La antigua imagen de hace 3.000 años reaparece en el idioma privado de una niña de 7 años con su padre.

Además quiero dar enormes gracias a LiSe Heyboer, ya que sin sus inspiradas investigaciones de los antiguos ideogramas (en inglés) yo estaría perdida.